Los baterías solares de alta eficiencia han sido construidos para asegurar que una mayor proporción de rayos solares se convierta en energía eléctrica. Cada vez más tecnologías avanzadas, como celdas multiunión y perovskita, ahora se están utilizando. Estas celdas son capaces de minimizar las pérdidas de energía por reflexión, recombinación y efectos térmicos. Por ejemplo, las celdas solares de silicio monocristalino pueden alcanzar eficiencias superiores al 25%. Las baterías solares de alta eficiencia son las más adecuadas para lugares donde hay espacio limitado. Esto se debe a que las baterías minimizan el área de paneles requerida para una determinada salida de potencia. Además, proporcionan un mejor retorno de la inversión cuando se exponen a rendimientos a largo plazo.